36 semanas de embarazo

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Edad del feto: 34 semanas

¿Qué tamaño tiene su bebé?

A estas alturas, su bebé pesa aproximadamente 2,7 kg; su longitud de vértex a rabadilla es de unos 34 cm, y su estatura total de 46 cm.

¿Qué tamaño tiene usted?

La parte superior de su útero se encuentra a unos 36 cm de la sínfisis púbica, más de 14 cm por encima del ombligo.

Lo más probable es que se sienta como si ya no le quedara más espacio en su interior! Su útero ha aumentado de volumen considerablemente durante las últimas semanas conforme el bebé iba creciendo en su interior. Ahora probablemente notará el útero justo debajo de las costillas.

Cómo crece y se desarrolla el bebé

Madurez pulmonar y respiratoria

Una parte muy importante del proceso madurativo de un feto es la maduración de los pulmones y del sistema respiratorio. Si un bebé nace prematuramente, uno de los problemas más habituales es el síndrome de insuficiencia respiratoria del recién nacido, también denominado enfermedad de la membrana hialino. En estos casos, los pulmones no han madurado completamente, y el bebé no puede respirar sin ayuda, por lo que se le tiene que administrar oxígeno.

Es posible que se tenga que conectar a una máquina, como un ventilador, para que pueda respirar correctamente.

A principios de los años setenta, los científicos desarrollaron dos métodos para evaluar la madurez de los pulmones fetales. Ambos métodos requieren practicar una amniocentesis. El primer método, la razón L/E (lecitina/esfingomelina), permite determinar si un bebé podrá respirar por sí solo después del parto.

La razón L/E no suele indicar que los pulmones de un bebé están maduros antes de las semana 34 (edad gestacional). En este momento, la razón existente entre los dos factores sanguíneos mencionados presentes en el líquido amniótico se modifica. Los niveles de lecitina ascienden, y los de esfingomelina descienden. La razón entre estas dos sustancias es lo que indica si los pulmones del feto están o no maduros.

La otra forma de evaluar la madurez de los pulmones del bebé es mediante la prueba del fosfatidilglicerol. Si se detecta esta sustancia en el líquido amniótico (resultado positivo), los médicos se tranquilizan; probablemente el bebé no presentará el síndrome de insuficiencia respiratoria del recién nacido.

En los pulmones hay células específicas que producen sustancias químicas que son fundamentales para que el bebé pueda respirar inmediatamente después del parto. Una parte importante de la capacidad respiratoria de un recién nacido está determinada por una sustancia química denominada surfactante. Un bebé prematuro puede nacer sin esta sustancia en los pulmones. No obstante, esta sustancia se puede introducir directamente en los pulmones del bebé para impedir que desarrolle el síndrome de insuficiencia respiratoria del recién nacido. Muchos de los bebés prematuros a quienes se les administra esta sustancia no tienen que ser conectados a un aparato de respiración asistida; pueden respirar por sí solos.

Cambios que le afectan a usted

Solamente faltan 4 o 5 semanas para la fecha de la salida de cuentas. Es normal que ya empiece a estar deseosa de que llegue el día del parto. Pero no le se le ocurra pedirle al médico que le induzca el parto a estas alturas.

Es posible que ya haya ganado entre 11,25 y 13,5 kg, y todavía le queda un mes de embarazo. De todos modos, no es nada raro que a partir de ahora se mantenga en el mismo peso en las sucesivas visitas.

En este momento tiene en su interior la máxima cantidad de líquido amniótico. En las semanas que se avecinan, el bebé seguirá creciendo. No obstante, su cuerpo reabsorberá parte del líquido amniótico, que no hace sino ocupar parte del espacio que podría ocupar el bebé. Es posible que note un cambio en las sensaciones que experimenta cuando se mueve el bebé. Algunas mujeres tienen la impresión de que el bebé no se mueve tanto como antes.

Cómo repercute su comportamiento en el desarrollo del bebé

La alimentación

Comer pescado puede ser una opción saludable durante el embarazo. Los ácidos y grasas omega-3, que se encuentran en el pescado, ayudan a controlar la tensión arterial y la preeclampsia. También favorecen el desarrollo cerebral del feto. De todos modos, no se exceda. No necesita más de 2,4 mg de ácidos grasas omega-3 diarios. Entre el pescado rico en estos aceites se incluye el salmón, la caballa, el arenque y el atún. Las investigaciones han demostrado que las mujeres que toman una variedad de pescados durante el embarazo, éste es más largo y dan a luz a bebés con mayor peso.

Cuanto más tiempo está un bebé dentro del útero, más probabilidades tiene de nacer sano.

Muchos peces está n contaminados con metilmercurio. Si una persona consume mucho pescado contaminado, correrá el riesgo de sufrir un envenenamiento por metilmercurio. Esta sustancia puede traspasar la placenta y llegar al feto. Durante el embarazo, reduzca el consumo de tiburón, pez espada y atún a un mínimo de 450 g al mes. El atún enlatado es más seguro, pero no tome más de dos latas de 170 g a la semana.

Hay muchas especies de peces entre las que puede elegir para ingerir una cantidad adecuada de nutrientes esenciales, vitaminas y minerales. La mayoría de los peces contienen poca grasa y son ricos en vitamina B, cobre, hierro, selenio y zinc. La lista que figura a continuación contiene pescados y mariscos que puede consumir en cualquier momento del embarazo; prepáreselos cocidos, asados, a la parrilla o al vapor. No abuse de la mantequilla y los fritos.

Róbalo
• pez gato
• almeja
• cangrejo
• roncador
• platija

pesca de agua dulce
• arenque
• langosta
• caballa
• aguja

pesca de agua salada
• ostra
• hipogloso del Pacífico
• abadejo
• salmón
• camarón
• lenguado

También debería saber …

Parto por cesárea

La mayoría de mujeres esperan tener un parto vaginal, pero la cesárea siempre es una posibilidad. En una cesá rea el bebé se extrae por una incisión practicada en la pared abdominal y el útero de la madre.

Motivos para practicar una cesárea

Las cesá reas se practican por muchos motivos, el más frecuente de los cuales es haber tenido un parto por cesá rea previamente. No obstante, algunas mujeres que han tenido un parto por cesárea pueden dar a luz vaginalmente en embarazos posteriores. Remítase a las explicaciones de la página 351. Si le practicaron una cesá rea en un embarazo anterior, pero a usted le gustaría dar a luz vaginalmente en esta ocasión, coménteselo a su médico. Existe el riesgo de que la cicatriz quirúrgica interna de la cesárea se abra durante el parto subsiguiente, lo que puede tener graves consecuencias. En estos casos, se suele aconsejar volver a practicar una cesárea para impedir la rotura del útero. No obstante, si el embarazo y el parto se monitorizan con sumo cuidado, algunas mujeres pueden tener un parto vaginal normal después de haber dado a luz mediante cesárea.

Las cesáreas también se practican cuando se constata que el bebé es demasiado grande para pasar por el canal del parto. Esto se denomina desproporción cefalopélvica. La desproporción cefalopélvica se puede sospechar durante el embarazo, sin embargo es algo que únicamente se puede confirmar una vez iniciado el parto.

El sufrimiento fetal es otro de los posibles motivos que pueden llevar a practicar una cesárea. Los médicos utilizan monitores fetales durante el parto para controlar el latido cardíaco del feto y su respuesta al parto. Si el latido cardíaco indica que el feto está teniendo problemas con las contracciones del parto, a veces se hace necesario practicar una cesárea para poder asegurar el bienestar del bebé.

Cuando el cordón umbilical queda aprisionado, a veces es necesario practicar una cesárea. El cordón umbilical puede salir por la vagina antes que la cabeza del bebé o puede quedar aprisionado por el cuerpo del bebé. Esto es muy peligroso, ya que puede bloquear la irrigación sanguínea que le llega al bebé. Una cesárea también puede ser necesaria cuando el bebé viene de nalgas, lo que significa que los pies y las nalgas del bebé entran primero en el canal del parto. Expulsar los hombros y la cabeza del bebé después del cuerpo puede provocar lesiones en la cabeza o en el cuello, sobre todo si se trata del primer embarazo.

El desprendimiento de placenta y la placenta previa también son buenos motivos para practicar una cesárea. Si la placenta se separa del útero antes del parto (desprendimiento de placenta), el bebé pierde el suministro de oxígeno y nutrientes. Esto se suele diagnosticar cuando la madre presenta una fuerte hemorragia vaginal. Cuando se da el caso de que la placenta bloquea el canal del parto (placenta previa), el bebé sólo puede nacer mediante parto por cesárea.

Incremento de la tasa de cesáreas

En 1965, sólo el 4% de los partos eran por cesárea. Hoy en día, en muchos países industrializados los partos por cesárea representan aproximadamente el 20% de todos los partos, y en algunas áreas se supera este porcentaje. Este incremento se debe en parte a una monitorización más estricta del feto durante el parto y al empleo de procedimientos más seguros en la práctica de la cesárea.

Otra de las causas del incremento de la tasa de cesá rea es que los bebés que nacen hoy en día son más grandes. Cuando un bebé es muy grande, a veces la única forma posible de que venga al mundo es mediante cesá rea. Los investigadores creen que el incremento en el tamaño de los bebés obedece a que las mujeres embarazadas se alimentan mejor y no fuman durante el embarazo. También es posible que este incremento de los partos por cesárea se deba a la mayor presión a que están sometidos los médicos para asegurar el bienestar del bebé.

¿En qué consiste una cesárea?

En el caso de que le tengan que practicar una cesárea, es posible que pueda estar consciente durante todo el proceso. El anestesista probablemente le administrará una anestesia epidural o raquídea. (Los distintos tipos de anestesia se explican en la semana 39.) Si usted está consciente durante el proceso, ipodré ver al bebé en cuanto nazca!

En una cesá rea se practica una incisión que atraviesa la piel de la pared abdominal hasta llegar al útero. Se corta la pared del útero y después el saco amniótico que contiene al bebé y a la placenta, extrayéndose al bebé a través de la abertura. Después se extrae la placenta y se cose el útero a capas con una sutura absorbible que no es preciso extraer. El resto del abdomen también se cose con hilo absorbible.

La mayoría de las cesá reas que se practican hoy en día son cesáreas bajas cervicales o cesá reas bajas transversas. Esto significa que la incisión se realiza en la parte inferior del útero.

Antes, las cesáreas se solían practicar efectuando una incisión clásica, en la cual el útero se cortaba desde la línea media hacia abajo.

Este tipo de incisiones no cicatrizan tan bien como las incisiones bajas.

cervicales. Al estar hecho el corte en la parte muscular del útero, es más fácil que se abra a causa de las contracciones que acompañan al parto vagina!. Esto puede provocar una fuerte hemorragia y puede ser muy perjudicial para el bebé. Si en un parto anterior por cesárea le practicaron una incisión clásica, todos los partos que tenga en el futuro deberán ser por cesá rea.

La incisión en forma de T invertida es otra forma de practicar la cesá rea. Esta incisión, que surca el útero longitudinal y transversalmente, permite disponer de más espacio para extraer al bebé. Si le practican este tipo de incisión, todos los partos que tenga después deberán ser por cesárea, pues también es fácil que se abra a causa de las contracciones uterinas.

Ventajas e inconvenientes del parto por cesárea

El parto por cesárea tiene sus ventajas; la principal es que permite dar a luz a un bebé sano. Es posible que el bebé que lleve en el vientre sea demasiado grande para pasar por su pelvis. En tal caso, la única forma de dar a luz es mediante una cesárea. No obstante, en general una mujer tiene que pasar por la experiencia de un parto para que su médico compruebe si el bebé cabe o no por el canal del parto. La mayoría de las veces es imposible predecir si una mujer podrá o no dar a luz vaginalmente.

y lleva consigo todos los riesgos asociados a una intervención quirúrgica. Entre estos riesgos cabe señalar posibles infecciones, el shock provocado por la pérdida de sangre, la posibilidad de que se formen coágulos de sangre y las lesiones de otros órganos, como la vejiga y el recto. Además, la cesárea exige que la madre permanezca más tiempo internada en el hospital que en un parto vaginal rutinario.

La recuperación de una cesárea es más larga que la de un parto vaginal. Recuperarse completamente de este tipo de intervenciones suele costar entre 4 y 6 semanas.

¿Tendrán que practicarle una cesárea?

Estaría bien saber con antelación si van a tener que hacerle una cesá rea antes de que se ponga de parto. Lamentablemente, suele ser necesario esperar a que empiecen las contracciones del parto por una serie de razones. Es imposible predecir si las contracciones del parto van a estresar al bebé, y suele ser bastante difícil predecir si el bebé va a caber por el canal del parto.

Algunas mujeres opinan que, si les tienen que practicar una cesárea, «no será lo mismo que dar a luz a un bebé.» Creen equivocadamente que no vivirán todo el proceso del nacimiento. Eso no es cierto. iNo habrán fracasado en nada!

Parto vaginal después de una cesárea

Debería intentar un parto vaginal si en un embarazo anterior le practicaron una cesárea? Dar a luz vaginalmente después de haber tenido un parto por cesárea cada vez es más habitual. Médicamente hablando, el método de dar a luz no es tan importante como el bienestar del bebé.

Antes de tomar ninguna decisión, usted y su médico deberían sopesar los pros y los contras de ambos tipos de partos tanto para usted como para el bebé. En algunos casos, no tendrán mucha elección. En otros, es posible que usted y el médico prefieran intentar el parto vaginal. Algunas mujeres prefieren que les vuelvan a practicar una cesárea desde el principio, porque no quieren intentar el parto vaginal para tener que acabar, de todos modos, con una cesárea.

Ventajas y riesgos de un parto vaginal después de una cesárea Las ventajas de un parto vaginal incluyen una disminución de riesgos de problemas asociados con cirugía mayor, como es la cesárea. La recuperación después de un parto vaginal es corta. Usted puede salir del hospital y estar en casa en un plazo más corto de tiempo.

Si usted es pequeña y el bebé es grande, puede necesitar una cesá rea. Un parto múltiple puede hacer difícil o imposible el parto vaginal sin peligro para los bebés. Problemas como la hipertensión o la diabetes pueden requerir repetir una cesárea.

Si a usted le gustaría intentar un parto vaginal después de haber tenido un parto por cesárea, coménteselo a su médico con suficiente antelación para que pueda planificar las cosas. Probablemente le monitorizarán el parto mediante monitores fetales. Y es posible que le abran una vía por si fuera necesario practicarle una cesárea.

Analice detenidamente las ventajas y los riesgos de intentar un parto vaginal después de que le hayan practicado una cesárea. Sopese las ventajas y los inconvenientes con su médico y con su pareja antes de tomar una decisión definitiva. No tema pedirle a su médico su opinión sobre las probabilidades que tiene de tener un parto vaginal con éxito. Él conoce bien su salud y la historia de su embarazo.

No olvide que tener un bebé es una empresa de 9 meses de duración. Aunque le tengan que practicar una cesárea, habrá hecho una gran proeza. Después de la cesárea, podrá coger en brazos al bebé y tal vez hasta amamantarlo.

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